TERAPIA OCUPACIONAL

Área de Terapia Ocupacional Infantil y Juvenil: Promoviendo la Autonomía y la Participación en la Vida Diaria

La Terapia Ocupacional es una disciplina sociosanitaria que tiene como objetivo principal promover la autonomía y la participación significativa en las actividades de la vida diaria. En el caso de niños, niñas y adolescentes, esta intervención se centra en el desarrollo y fortalecimiento de habilidades motoras, sensoriales, cognitivas, emocionales y sociales necesarias para desenvolverse de forma funcional en sus distintos entornos: hogar, escuela y comunidad.

Desde esta perspectiva, el/la terapeuta ocupacional acompaña a cada menor en un proceso personalizado, utilizando actividades con propósito (juego, rutinas diarias, tareas escolares, entre otras) para facilitar su desarrollo integral, mejorar su calidad de vida y fomentar una mayor independencia.

¿Qué se trabaja en Terapia Ocupacional con niños y adolescentes?

La intervención abarca una amplia variedad de áreas clave para el desarrollo:

      • Actividades de la vida diaria (AVD): Aprendizaje y mejora de habilidades como vestirse, asearse, alimentarse, ir al baño o calzarse, con el fin de fomentar la autonomía personal.

      • Motricidad fina y gruesa: Desarrollo de la coordinación, la fuerza, el equilibrio y el control postural, aspectos esenciales para tareas como escribir, recortar, correr o jugar.

      • Habilidades cognitivas y de organización: Entrenamiento en funciones ejecutivas como atención, memoria, planificación y resolución de problemas.

      • Regulación sensorial: Intervención sobre el procesamiento sensorial, ayudando al niño a responder de manera adecuada a los estímulos del entorno (luz, sonido, tacto, movimiento, etc.), especialmente en casos de hipersensibilidad o hiposensibilidad sensorial.

      • Juego y ocio: Estimulación del juego funcional, simbólico y social como herramienta clave para el aprendizaje, la expresión emocional y la interacción con sus pares.

      • Participación social: Apoyo en la adquisición de habilidades sociales, comunicación, manejo emocional y resolución de conflictos, favoreciendo una integración activa y saludable en su entorno.

      • Adaptaciones y productos de apoyo: Recomendación de ayudas técnicas, adecuación del entorno escolar o del hogar, y adaptación de materiales para facilitar la participación del menor en sus contextos habituales.

¿A quién va dirigida esta intervención?

Nuestro servicio de Terapia Ocupacional está especialmente orientado a niños, niñas y jóvenes con los siguientes diagnósticos o condiciones:

      • Trastorno del Espectro Autista (TEA): Intervención individualizada para mejorar la comunicación, la autonomía, la regulación sensorial y la interacción social.

      • Trastorno por Déficit de Atención con o sin Hiperactividad (TDAH): Apoyo en la mejora de la atención sostenida, organización, autorregulación y habilidades para la vida diaria.

      • Parálisis Cerebral Infantil y otros trastornos neuromotores: Rehabilitación y estimulación motora para maximizar la independencia funcional y la calidad de vida.

      • Trastornos del Procesamiento Sensorial (TPS): Regulación y adaptación sensorial para mejorar la participación y la respuesta adecuada a los estímulos del entorno.

      • Retrasos en el desarrollo psicomotor o global: Estimulación temprana e intervención para potenciar el desarrollo en todas las áreas afectadas.

      • Trastornos del desarrollo de la coordinación (TDC) o dispraxia: Apoyo en el desarrollo de la planificación motora y la coordinación.

      • Trastornos del aprendizaje: Intervención en aspectos que interfieren con el rendimiento académico, como la motricidad fina (escritura), la atención o la organización.

      • Niños sin diagnóstico pero con dificultades funcionales específicas: Que presentan retos en el desarrollo de habilidades necesarias para su autonomía y participación cotidiana.

Objetivo de la intervención

El propósito de la terapia ocupacional infantil y juvenil es empoderar al menor y su entorno familiar, promoviendo el máximo grado posible de independencia y participación. El abordaje es individualizado, centrado en la persona y se realiza desde una mirada interdisciplinar y colaborativa, trabajando en coordinación con profesionales de la salud, la educación y la familia.

El acompañamiento del terapeuta ocupacional no solo mejora el desempeño funcional del niño o joven, sino que también fortalece su autoestima, fomenta su inclusión social y contribuye a una mejor calidad de vida para él y su entorno.